El gobierno de José Manuel De la Sota (PJ) envió a la Legislatura, en la que cuenta con una cómoda mayoría, un proyecto de ley para otorgar 600 pesos a las embarazadas que no tengan empleo formal, que carezcan de una obra social y que concurran al sistema público de salud, una vez que nazca el niño.
El proyecto se denomina “Derecho Complementario por Nacimiento” y precisa que se “otorgará a la mujer parturienta, por única vez y por cada hijo o hija que nazca con vida, la suma de 600 pesos”.
Para acceder al beneficio, el proyecto establece que las mujeres deberán residir en Córdoba, no poseer empleo formal, no disponer de cobertura social ni de servicios de medicina prepaga, concurrir al sistema público de salud y someterse a los controles prenatales obligatorios. Asimismo, especifica que las beneficiarias podrán seguir gozando de “cualquier otro beneficio que tuvieran acordado o que pudieran acordársele en el futuro, tanto en el ámbito nacional, provincial o municipal”.
De ser aprobado el proyecto que impulsa el oficialismo, y que podrá ser complementario de otros (Plan Nacer y Asignación Universal por Hijos para embarazadas), el beneficio “se otorgará a las mujeres que dieran a luz a partir del día de entrada en vigencia” de la norma.
Para poner en marcha el programa, el gobierno provincial debería destinar unos 12 millones de pesos y, según cálculos previos de la propia bancada oficialista, beneficiará a unas 20.000 embarazadas por año.
