Persevera y triunfarás…

En la sesión preparatoria del Senado de la Nación, La Cámpora, agrupación liderada por el hijo de la Presidenta, intentó quedarse con cargos administrativos que... Por Cuarto Intermedio

En la sesión preparatoria del Senado de la Nación, La Cámpora, agrupación liderada por el hijo de la Presidenta, intentó quedarse con cargos administrativos que tradicionalmente se designan entre los principales bloques. No obstante, la figura de Máximo no bastó para torcer la balanza en esta oportunidad.

En la sesión preparatoria que el Senado de la Nación realizó el 29 de febrero, La Cámpora intentó quedarse con cargos administrativos que se reparten entre los principales bloques políticos. Pretendían -además de las Prosecretaría de Coordinación Operativa y la Dirección del Instituto Federal de Estudios Parlamentarios, que ya le habían concedido- acceder a los cargos de Prosecretario Administrativo, actualmente ocupado por Mario Daniele, y el del Prosecretario Parlamentario Luis Borsani, hombre del radicalismo.

Que iban a ir tras este último se sospechaba desde el año pasado, considerando que era muy factible aprovecharse se las divisiones internas del radicalismo. Lo que era difícil imaginar, es que también atentarían contra Daniele, en quien desde hace tiempo Pichetto confía para controlar la asignación de los recursos que maneja la presidencia del Senado a través de la Secretaría Administrativa, hoy en manos de “Juanchi” Zabaleta, mano derecha de Boudou desde tiempos del Anses.

Tal vez, por desconocer el paño o por la necesidad de dar buenas señales hacia Máximo Kirchner cuando el Vicepresidente atraviesa momentos de zozobra y cuestionamientos internos tan graves como los externos, es que Boudou se prestó a esta escaramuza que seguramente dejará heridas.

Los ambiciosos jóvenes no se darán por vencidos. Quizás -y sería bueno que así ocurra-, Pablo Cano, nuevo director de Instituto Federal de Estudios Parlamentarios, comience a darle al IFEP una impronta que hasta ahora le faltó, a punto tal que hasta muchos de los legisladores desconocen las funciones y posibilidades de ese Instituto.

Seguramente guardarán sus pretensiones hasta la próxima oportunidad, aunque por las dudas ya se estarán preguntando cuándo planea jubilarse el casi legendario Secretario Parlamentario Juan Estrada, a quien la Presidenta debió sostener ante un embate de Zannini el pasado diciembre.