La Cámara del Crimen revocó el sobreseimiento de dos jóvenes que intentaron sustraer un paquete de café de una sucursal de la cadena Starbucks, en pleno centro porteño, en un polémico fallo que puso a los imputados al borde de un juicio oral en el que podrían ser condenados a penas que llegan a los dos años de prisión.

Los camaristas Juan Esteban Cicciaro y Mariano Scotto anularon el sobreseimiento dictado en primera instancia por el juez Luis Alberto Schelgel, quien había sobreseído a ambos imputados por considerar que debía aplicarse el “principio de insignificancia” que exime de pena a los presuntos autores del hecho ya que buena parte de la doctrina considera que el perjuicio patrimonial que provoca la conducta es nimio.

“La conducta aquí investigada carece de relevancia que le otorgue entidad típica … toda vez que el valor de lo que se habría procurado sustraer no posee una entidad patrimonial suficiente como para conmover el tipo penal del hurto, que requiere una afectación a la propiedad, de tal entidad que sea necesaria la intervención del Derecho Penal”.

La Cámara replicó que “de la manera como se encuentra legislado el hurto, cualquiera que sea la magnitud de la afectación del bien tutelado que resulte como consecuencia del apoderamiento ilegítimo, en tanto no se prevén grados ni límites, hace que la conducta quede comprendida en el referido artículo 162 del Código Penal” que castiga con prisión de un mes a dos años a quien “se apoderare ilegítimamente” de una cosa “total o parcialmente ajena”.