Rechazan dictar medida cautelar que impida la trasferencia del control del juego a la Ciudad

El juez en lo contencioso administrativo federal Esteban Furnari rechazó dictar una medida cautelar que impida la transferencia del control sobre las actividades del juego... Por Cuarto Intermedio

El juez en lo contencioso administrativo federal Esteban Furnari rechazó dictar una medida cautelar que impida la transferencia del control sobre las actividades del juego que cumplen los agentes operadores de Lotería Nacional a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

La medida provisoria había sido solicitada en el marco de la demanda promovida por el Sindicato de Trabajadores de Juegos de Azar, Entretenimiento, Esparcimiento, Recreación y Afines de la República Argentina (ALEARA) “en representación de todos los afiliados y trabajadores”, contra el Estado Nacional y la Ciudad.

Los demandantes sostuvieron que la eventual transferencia del poder de policía sobre las actividades del juego a la Ciudad vulnera su derecho a mantener una relación de trabajo sin injerencia estatal y disposiciones de las constituciones local y nacional.

Según la demanda, la facultad reconocida al Gobierno Federal para establecer acuerdos de participación en el producido del juego o la transferencia de facultades de policía “sólo ha sido reconocida a favor de las Provincias y no de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.

En su contestación el Estado Nacional sostuvo que la medida cautelar solicitada pretendía impedir su “legítimo derecho” y el de la Ciudad de Buenos Aires a ejercer el poder de policía en materia de regulación, administración, explotación y control de los juegos de azar que se explotan en la Capital Federal.

Agregó que la medida provisoria no cumple con el objeto de proteger a las fuentes de trabajo, pues quien tiene la absoluta potestad de decidir quién continúa o no siendo empleado es la empresa.

Al oponerse al dictado de la medida cautelar Furnari concluyó que los demandantes no probaron la existencia de un perjuicio directo a sus intereses.

El magistrado expuso que las atribuciones atinentes a seguridad, moralidad, salubridad, higiene y buenas costumbres competen desde antiguo a la Ciudad de Buenos Aires.

El juez avaló, además, las inspecciones de la Agencia Gubernamental de Control en los restaurantes, confiterías, salones de fiestas, cines y teatros que funcionan en el predio del Hipódromo de Palermo.