Paro docente: “La medida de fuerza es el resultado de la falta de diálogo”

Desde la Federación de Educadores Bonaerenses destacaron que durante el primer día de la medida de fuerza se registró una adhesión cercana al 90%; y recordaron que recién fueron convocados para discutir la paritaria en febrero y no a finales del año pasado, tal como lo venían reclamando. Por Cuarto Intermedio

Tras resaltar que en la primera de las jornadas del paro docente por 48 horas convocado por los gremios se registró una adhesión de entre el 85 y el 90 por ciento en la Provincia de Buenos Aires, la titular de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirta Petrocini, manifestó que la medida de fuerza es el resultado de la falta de diálogo por parte de la administración de la gobernadora Vidal, a la que acusó de haber intentado demonizar tanto a los maestros como a sus representantes.

“El paro es la última instancia a la que debimos recurrir ante la decisión de las autoridades de no realizar una oferta salarial acorde a las necesidades del sector. El compromiso asumido en la última paritaria era comenzar a discutir la estructura salarial en noviembre de 2017, pero nunca nos recibieron. Recién se dio la primera reunión salarial en febrero, con tres propuestas idénticas, que no daban respuesta a las genuinas necesidades del sector”, sostuvo.

Asimismo, la dirigente consideró que si realmente querían discutir los salarios con los chicos adentro de las escuelas, entonces los hubieran recibido en noviembre o en diciembre, cuando los alumnos y los docentes estaban en las aulas, y no a último momento para hacerles tres propuestas que terminaron rechazando por insuficientes.

“Sabemos también que hoy hay muchos docentes que han tenido que ir a trabajar, incluso apoyando la medida de fuerza, porque un día de descuento les significa no poder pagar la luz o el gas o poner un plato de comida en la mesa. Más de la mitad de los docentes se encuentran hoy por debajo de la línea de la pobreza”, agregó Petrocini.

Por último, aseguró que existe un componente muy importante de “intimidación” hacia su sector, pero que no están dispuestos a involucrarse en una demostración de fuerza.

“No trabajamos para el paro, sino para encontrar una solución inmediata a los numerosos problemas que atravesamos a diario. Queremos estar dando clases, hablando con nuestros alumnos y con sus padres, pero se hace muy difícil en un contexto como el que ha presentado el gobierno”, concluyó.