Los gremios estatales protagonizarán una jornada de protesta que incluirá una masiva movilización a la Plaza de Mayo, donde se llevará a cabo el acto central. Se reclama, entre otras cuestiones, por la reapertura de paritarias y también para que sea decretada la “emergencia alimentaria”.
Un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa arrojó que durante la medida de fuerza los comercios perdieron ventas por $14.114 millones y que las industrias producción por $6.081 millones. No obstante, se estima que unos $11.151 millones de lo que se dejó de vender o producir se pueden recuperar en los próximos días.
La medida de fuerza se siente con fuerza en gran parte del país ante la falta de transporte público, lo cual imposibilita a muchas personas llegar a sus puestos de trabajo. Por otra parte y pese a algunos intentos para cortar determinadas calles, no se registraron mayores incidentes.
Desde la entidad se mostraron en desacuerdo con la medida de fuerza de alcance nacional convocada por la central obrera y los gremios opositores, al considerar que la misma resulta particularmente inoportuna en la coyuntura actual.
Los gremios opositores que iniciaron la jornada de protesta contra las políticas económicas del Presidente Mauricio Macri, culminarán con un acto en la Plaza de Mayo. El transporte y los servicios públicos se vieron parcialmente afectados por la medida de fuerza.
Las agrupaciones lideradas por Pablo Moyano, Hugo Yasky, Pablo Micheli y Sergio Palazzo encabezarán la jornada de protesta convocada para el 30 de abril en contra de las políticas económicas adoptadas por la administración del Presidente Macri. Se verán afectados varios servicios públicos.
El dirigente camionero expresó a través de un video la decisión de convocar a un paro general para el último día de abril en rechazo a las políticas económicas que vienen siendo implementadas por la Casa Rosada. “Hoy va a ser una jornada muy importante”, había anticipado.
El mandatario santafesino expresó su desacuerdo en relación al acuerdo que en las próximas horas se alcanzaría entre el Gobierno nacional y la CGT respecto al pago de un bono de fin de año. “Es un manotazo de ahogado”, señaló.
El dirigente del gremio de la Sanidad y secretario General de la CGT junto a Carlos Acuña, dijo tras la reunión del Consejo Directivo de la central obrera que si bien continúan con las negociaciones por el bono, la posibilidad de convocar a una nueva medida de fuerza está más alejada.
Luego del encuentro con los representantes del Gobierno y de las Cámaras empresarias, el dirigente de la CGT remarcó que primero aguardarán para ver la “letra chica” del acuerdo para luego comunicar su decisión respecto a la convocatoria de una nueva medida de fuerza de alcance nacional.