Uno de los agentes de inteligencia que actuó en el aparato represivo de la dictadura desde antes del golpe de Estado de 1976 seguirá preso en una cárcel común. Está condenado a prisión perpetua por su actuación en el centro clandestino de detención conocido como “Automotores Orletti”.
Los organismos oficiales de defensa de los derechos humanos nacional y bonaerense pidieron la pena de prisión perpetua para los seis acusados por crímenes de lesa humanidad en el marco del juicio conocido como “contraofensiva”.
La fiscalía federal y las tres querellas que intervienen en el juicio oral y público por violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura en la provincia de Salta pidieron penas de entre 15 años y prisión perpetua para el ex juez federal Ricardo Lona, ya involucrado en otros procesos por hechos de similar naturaleza.
La mayor de la condenas recayó sobre el ex jefe de la División Inteligencia Operativa del Comando de Operaciones Navales, Sergio Leonardo Aráoz Lamadrid. Además, recibieron penas de entre tres y dieciocho años de prisión otros diez ex integrantes de la Armada y uno de Prefectura.
La Cámara de Casación anuló la prisión domiciliaria que había concedido el Tribunal Oral Federal de Santiago del Estero al represor Ramiro López Veloso, condenado a prisión perpetúa en la cárcel federal de Colonia Pinto por el crimen del estudiante Cecilio Kamenetzky, en noviembre de 1976, en un simulacro de fuga.
El ex jefe de la barra brava de River Plate, Alan Schlenker, continuará detenido en un penal de Chubut, al que fue trasladado el año pasado y en el que se encuentra lejos de su familia y en inhóspitas condiciones de alojamiento.
La Cámara Nacional de Casación anuló un juicio oral contra un policía que mató a un manifestante que bloqueaba el tránsito en protesta por los reiterados cortes de luz que sufría. Fue condenado sólo por “homicidio en exceso de legítima defensa”.
Un tribunal oral condenó a prisión perpetua a un ladrón que en 2015 asaltó la parrilla La Brigada, en el barrio porteño de San Telmo, y en la huida asesinó a uno de los empleados del restaurante.
A los apuntados se los investigaba por la privación ilegal de la libertad y el sometimiento a tormentos de 352 víctimas, así como también por el homicidio agravado de 19 de ellas cometidos en el centro clandestino de detención que funcionara en las sedes conocidas como “Atlético”, “Banco” y “Olimpo”.
La Corte Suprema de Justicia revocó un fallo que protegía contra la detención a dos ex jueces mendocinos condenados a prisión perpetua por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura.