Con los chinos no

El juez federal Rodolfo Canicoba Corral anuló una orden internacional de detención que había dictado a fines del año pasado su ahora ex colega Octavio... Por Cuarto Intermedio

El juez federal Rodolfo Canicoba Corral anuló una orden internacional de detención que había dictado a fines del año pasado su ahora ex colega Octavio Aráoz de Lamadrid contra el ex líder del Partido Comunista chino Jiang Zeming y otros exponentes del régimen de Beijing.

(Cuarto Intermedio – 18 de febrero de 2010)- Aráoz de Lamadrid se había convertido en una suerte de “juez Garzón argentino” y decretó que la Justicia Internacional había llegado a Buenos Aires, ya que pretendía perseguir judicialmente por “genocidio” a la cúpula del régimen chino, por la supuesta persecución y matanza de integrantes de la agrupación Falung Gong en todo el mundo.Después de tramitar cuatro años la causa, ordenó la detención internacional de Zeming, lo que implicaba virtualmente que en cuanto pisara un país con tratado de extradición con la Argentina debía ser arrestado, puesto en un avión y mandado a Comodoro Py para declarar como acusado de “genocidio”.Faltaba, para entonces, un mes para que Cristina Fernández de Kirchner viajara a China.Pero Aráoz de Lamadrid, jaqueado por un complicado frente interno, renunció, y durante enero -en plena feria judicial- Canicoba Corral anuló por “prematura” la orden de detención. Así, Jiang Zeming, que probablemente nunca se haya enterado de la situación, recuperó su capacidad para viajar libremente por un mundo que se espanta por las violaciones a los derechos humanos en los países pobres, pero no cuestiona con igual vehemencia al régimen totalitario de una de las grandes potencias económicas del mundo.