Oficialismo y oposición evaluarán una ley partiendo “de cero”, al margen de la iniciativa del gobernador Daniel Scioli.

(Cuarto Intermedio – 10 de mayo de 2010)- Senadores del oficialismo y la oposición comenzarán en los próximos días a trabajar en la elaboración de un proyecto de ley orientado a remozar y actualizar integralmente el Código Contravencional de la provincia, con el objetivo de alcanzar un consenso que permita llevar el análisis al recinto en los próximos meses.Fuentes del Senado confirmaron la iniciativa y reconocieron que la línea de trabajo acordada implica de algún modo dejar de lado el polémico proyecto que, en el mismo sentido, elaboró el ministro de Seguridad, Carlos Stornelli a partir de criterios de la cúpula policial, y envió el Poder Ejecutivo a fines del año pasado, y que no ha logrado los consensos mínimos para avanzar en su tratamiento.Ante la evidencia de que el proyecto de Contravenciones enviado por la administración de Daniel Scioli podría quedar largos meses encerrado en la discusión con sectores de la oposición que ya adelantaron fuertes rechazos a la iniciativa, y aún del propio oficialismo, este bloque ahora impulsará un proyecto a elaborar “desde cero”.Claro que la movida no implica excluir totalmente al Ejecutivo. Para la elaboración del proyecto se convocará a representantes del gobierno provincial para que también aporten al debate sus criterios y para que conozcan los avances de la nueva iniciativa.Esta estrategia fue decidida en las últimas semanas, luego de que desde el Ejecutivo volvieran a enviar a la Legislatura señales sobre “la necesidad de impulsar el tratamiento” del proyecto que Scioli envió el año pasado y que aún no logró sortear el filtro del análisis en las comisiones.La iniciativa del Ejecutivo fue girada en diciembre junto a otro proyecto para reformar el Código de Procedimiento Penal y endurecer los criterios de excarcelación. Pero mientras que ese proyecto ya fue aprobado por las dos cámaras y convertido en ley recientemente, el del Código de Faltas no muestra avance alguno.En líneas generales, el proyecto enviado por Scioli actualiza el Código a partir de la incorporación de una serie de figuras que desde el Poder Ejecutivo se entienden como hechos que, sin configurar delitos, comprenden nuevos comportamientos urbanos que deben controlarse y reprimirse.Entre esas nuevas figuras, el texto propone penar con multas o arresto a comportamientos contra la moralidad pública, las buenas costumbres, la tranquilidad, el orden público, la fe pública, el medio ambiente y otros en perjuicio de menores de edad.A lo largo de sus 168 artículos, dispone sanciones para el que “provocare a pelear”, el que circule por la vía pública con el rostro oculto, el que porte armas de cualquier tipo (como los palos de los piqueteros), el que transporte animales peligrosos, y la actividad de los cuidacoches y los llamados “trapitos”, entre otras.Rápidamente el proyecto sumó fuertes rechazos de sectores vinculados a organismos de Derechos Humanos, que consideran que la iniciativa apunta a “perseguir y reprimir la protesta social” y que criticaron la decisión de “otorgar más poder a la Policía”.En el plano legislativo, el proyecto tampoco logró obtener consensos entre la oposición e, incluso, entre el propio bloque de senadores oficialistas, donde también hay planteos de tipo ideológico y otros más técnicos. “Es demasiado extenso y muy desprolijo en su redacción”, lo criticaron, en voz baja, senadores del Frente para la Victoria en varias ocasiones.