Los legisladores del juecismo dieron una vuelta de campana sobre su posición inicial y manifestaron su rechazo al aumento de las remuneraciones, que habían acordado con el peronismo y el radicalismo.

(Cuarto Intermedio – 28 de junio de 2010)- Después de la reprimenda de Luis Juez y de la amenaza de los gremios estatales de que marcharían hacia la Legislatura para protestar por la suba de los salarios de funcionarios del Poder Ejecutivo y de los representantes, los miembros del Frente Cívico y Social expresaron que no aceptaban el incremento. Por ello, los peronistas, que son mayoría en la Cámara, resolvieron mandar al archivo el proyecto que había enviado el gobernador Juan Schiaretti.Los aumentos iban desde los 2.500 hasta los 4.500 pesos en una suma no remunerativa, y era provisorio y revocable por el gobernador, en el caso de los funcionarios del Poder Ejecutivo, y por el vicegobernador para los legisladores. Las dietas llegarían, con la suba, hasta los 14 mil pesos.Juez acusó de ingenuos y de faltos de ética a sus legisladores, por lo que estos retrocedieron en su impulso original, pese a que negociaban el tema desde hace seis meses.Una consecuencia de esta polémica fue una nueva ruptura del bloque del Frente Cívico y Social. La legisladora Adela Coria renunció a la bancada criticando que los demás aceptaran el aumento. Y consideró indeclinable su dimisión pese a que luego el juecismo, como quedó dicho, se arrepintió. Coria responde al viceintendente Carlos Vicente y en realidad aprovechó el conflicto para separarse, como había hecho antes su jefe político del juecismo.