Se reaviva el cortocircuito entre Scioli y legisladores del oficialismo

Un sector del bloque del Frente para la Victoria plantea “malestar” por manejo institucional y diferencias políticas. (Cuarto Intermedio – 6 de septiembre de 2010)-... Por Cuarto Intermedio

Un sector del bloque del Frente para la Victoria plantea “malestar” por manejo institucional y diferencias políticas.

(Cuarto Intermedio – 6 de septiembre de 2010)- La esforzada y compleja negociación que desplegaron durante las últimas semanas los diputados oficialistas para lograr la aprobación del proyecto enviado por el Poder Ejecutivo para ampliar partidas presupuestarias, reavivó en un sector de la bancada del peronismo oficialista (PJ-Frente para la Victoria) un “malestar” con el gobierno de Daniel Scioli que amenaza con salir a la superficie en los próximos meses, a medida que se vaya agitando el proceso electoral.La búsqueda de acompañamiento de bloques opositores para lograr el número necesario para “sacar” esa ley reclamada por Scioli, y que finalmente se aprobó el jueves pasado, dejó en la tropa oficialista de la Cámara baja un inocultable enojo por el rol jugado por quienes debieron ser sus interlocutores en el Ejecutivo.El nuevo frente de conflicto se abre cuando todavía resuenan los ecos de la polémica desatada el pasado mes de enero, cuando trascendió una batería de críticas al gobierno provincial que lanzaron en un almuerzo privado en Pinamar los hombres de ese espacio.Hay, por estas horas, un reproche compartido por los diputados, que apunta a la actuación de lo que los legisladores denominan “el sciolismo” -y que refiere centralmente al gabinete del gobernador- en el proceso de negociación para la aprobación de proyectos de peso, ahora que el oficialismo ya no controla la mayoría en esa Cámara.En ese marco, los legisladores cuestionan que el Ejecutivo haya girado el proyecto de Ampliación Presupuestaria con la premisa de que no se le cambie “ni una coma” y critican la intervención de los ministros que se sumaron la discusión con la oposición.“No se puede mandar una ley que tiene que ver con los recursos y la deuda y pedir que no se le cambie una coma. Es una actitud soberbia”, explica uno de los hombres del bloque.En medio de numerosas consideraciones fuera de micrófono, hubo un legislador que rompió el tono reservado y “blanqueó” ese malestar. Fue Juan Garivoto, histórico integrante de ese bloque. “El gobierno provincial hizo poco y lo poco que hizo lo hizo en un sentido contrario, como por ejemplo, las poco felices declaraciones del ministro de Economía. Ningún consenso parte de la premisa de que no se puede modificar una coma. Cuando no tenés la mayoría, no se puede hacer eso; hay que consensuar”, dijo.El nuevo episodio volvió a dejar al descubierto la baja sintonía del Ejecutivo con la tropa oficialista en Diputados que, sin embargo, hasta ahora no ha menguado los esfuerzos de ese bloque para aprobar las leyes que pide Scioli, pero que sí incrementa la distancia política.Compuesta por 37 legisladores, un número que lo obliga a buscar acompañamientos opositores hasta para conseguir quórum, la bancada conducida por Raúl Pérez se caracteriza por la diversidad de origen de sus integrantes y por la ausencia de referentes del “sciolismo” puro.“Actualmente el bloque tiene seis o siete ´terminales´ políticas y ninguna se referencia con Scioli. Hay gente de movimientos sociales ultrakirchneristas, otros vinculados a intendentes o a ministros del gobierno nacional. Pero el gobernador no tiene ni un hombre propio”, graficaron desde ese espacio.