La Cámara del Crimen anuló una causa en la que la policía había hallado un vehículo robado en una casa de Florencio Varela, pero secuestró el rodado y detuvo a la dueña de la vivienda sin que existiera una orden judicial.
(Cuarto Intermedio – 3 de noviembre de 2010)- Por aplicación de lo que en derecho penal se conoce como “fruto del árbol envenenado”, toda la causa quedó anulada a partir de la foja 11 del expediente; la mujer fue liberada y es una incógnita qué pasará con la investigación y con el vehículo recuperado. Según las constancias de la causa, la policía recibió un llamado advirtiendo que “en el domicilio de la calle Hernandarias e/ 1ro. De Mayo y San Niqueló de Florencio Varela, habría un automóvil de la marca Peugeot 504”, sin mayores referencias ni precisiones. “Los preventores se dirigieron al lugar y, luego de constatar que efectivamente el rodado se encontraba allí (sin que surja con claridad si ello sucedió previo al acceso al lugar), procedieron a llamar a la vivienda, siendo atendidos por una persona del sexo femenino quien manifestó ser la dueña de la casa, agregando que momentos antes un sujeto que conoce del barrio había dejado estacionado el vehículo ahí”, añade el expediente.El auto tenía pedido de secuestro, lo que fue constatado en ese momento por los uniformados, que lo secuestraron y detuvieron a la mujer. “En el caso no medió orden alguna de juez competente para proceder al registro del lugar donde fuera encontrado el automotor previamente sustraído, ni tampoco se presentaban las situaciones de excepción que justificasen el procedimiento: incautación del vehículo con pedido de secuestro y la detención de la imputada”, sostuvieron los integrantes de la Cámara del Crimen Alberto Seijas y Marcelo Lucini.