Legisladores opositores no avalarán la fuerte suba prevista por el ministerio de Economía comandado por Alejandro Arlía, aunque admitirían un ajuste menor.
(Cuarto Intermedio – 9 de noviembre de 2010)- La decisión del gobierno bonaerense de impulsar para el año próximo una fuerte modificación en el cómputo para el cobro del denominado Impuesto a la Herencia disparó en las últimas horas una fuerte reacción de legisladores de la oposición, que advirtieron que no acompañarán una medida de esa naturaleza en el tratamiento de la Ley de Presupuesto y la Ley Financiera 2011 ya girada por el Ejecutivo.La modificación propuesta apunta básicamente a modificar el mínimo no imponible para el cobro de este impuesto, que de acuerdo al proyecto enviado por la administración de Daniel Scioli al Senado, bajaría de 3 millones de pesos a 100 mil pesos, aunque ese cómputo se aplicaría a lo que reciba cada uno de los herederos, mientras que en la actualidad se aplica al monto total de la herencia.La iniciativa despertó un fuerte rechazo de legisladores de la Coalición Cívica, la Unión Cívica Radical y el GEN, que anunciaron que buscarán dejarla sin efecto en la discusión que ya se abrió en torno al Presupuesto 2011.Pero el ministro de Economía bonaerense, Alejandro Arlía, ratificó la decisión de impulsar la medida al señalar que con estos cambios la Provincia va a “recuperar el impuesto a la herencia”. Y se quejó porque la “prensa está difundiendo cosas erróneas” en este sentido.En ese marco, fuentes legislativas explicaron que el debate en torno a este polémico punto ya generó algunas posturas intermedias, como la posibilidad de fijar el mínimo no imponible en 1 millón de pesos y mantener el esquema actual de cómputo para el total de la herencia.En la propuesta oficial se establecen nuevas escalas de alícuotas y diferentes categorías, según el grado de parentesco. Por caso, hasta 125 mil pesos, la transferencia de bienes pagará un 4 por ciento sobre el excedente de ese límite (100 mil pesos) en el caso de padres, hijos y cónyuges; del 6 por ciento para ascendientes y descendientes y del 10 por ciento cuando se trate de parientes colaterales de tercer y cuarto grado.“Hay que evitar que se le meta la mano en el bolsillo a los que menos tienen. Es un proyecto típico de supuesta defensa de intereses populares, pero en realidad terminará afectando a toda la clase media”, dijo el diputado de la Coalición Cívica Oscar Negrelli.Por su parte, el diputado de la UCR Sergio Panella aseguró que “el piso que impulsa el Ejecutivo es demasiado bajo y en vez de ayudar a una familia que tiene hijos lo que harán es licuar la herencia y afectar a porciones muy grandes de la población”. Una postura similar mostró el titular del bloque de Senadores del GEN, Luis Malagamba, quien dijo que esta medida “obedece sólo a fines recaudatorios”.En medio de esas críticas, el ministro Arlía ratificó la decisión de impulsar esta medida y explicó que si bien se modificará el monto mínimo que tribute, recordó que para el cálculo de la base imponible se tendrá en cuenta el número de herederos. “Es decir, que tiene que haber un mínimo no imponible de 100 mil pesos por heredero”, detalló, aunque ese concepto no está nítidamente expresado en el proyecto que se envió a la Legislatura.