En los últimos días trascendió la información que indicaba que la Cámara del Crimen sobreseyó al jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, en una causa en la que estaba imputado junto con otros funcionarios.
(Cuarto Intermedio – 27 de junio de 2011)- Cuarto Intermedio ha hablado en reiteradas oportunidades sobre ese expediente, en el que además de Macri aparecían investigados el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta; el ex ministro de Espacio Público Juan Pablo Picardo y los empresarios mendocinos Eduardo Raúl y Orlando Roberto Terranova. El fallo dictado por la Cámara se fundamenta en jurisprudencia de la Corte Suprema del año 2002, cuando aún regía en el máximo tribunal la “mayoría automática” afín al menemismo. Y desde ese punto de vista, el fallo es impecable, pero lo cierto es que de su lectura se desprende (y así lo reconocen los propios jueces que lo firman) una tremenda sensación de injusticia. Oportuna para Macri, ya que le llega a un mes de las elecciones porteñas de renovación de jefe de Gobierno.La causa, también se ha dicho en ediciones anteriores, es una de las “malditas” de la Justicia. Generó un infarto a un juez, la ruptura de una amistad de 20 años entre un abogado y un camarista, y ahora acaba de cobrarse una nueva víctima. El fiscal que tenía a su cargo la investigación era Mariano Solessio. Hace tres meses sufrió un accidente cerebrovascular del que se está recuperando fatigosamente. En los pasillos de tribunales no son pocos los que sostienen que la Cámara cerró la causa para evitar que la maldición se siga llevando puestos a quienes tienen relación con ella.