La oposición bonaerense denuncia que faltan boletas y que son demasiado caras

Dicen que la impresión de las listas costará mucho más que lo que dispuso pagar el Gobierno. (Cuarto Intermedio – 2 de agosto de 2011)-... Por Cuarto Intermedio

Dicen que la impresión de las listas costará mucho más que lo que dispuso pagar el Gobierno.

(Cuarto Intermedio – 2 de agosto de 2011)- El operativo de las boletas -impresión y distribución- concentra por estas horas, en las fuerzas electorales bonaerenses, las mayores preocupaciones vinculadas a la instrumentación de las elecciones internas que se celebrarán en menos de dos semanas. Para estos comicios, “las boletas serán caras y pocas”, afirmaron desde la oposición.El de las boletas es uno de los capítulos que, con la creación del sistema de elecciones primarias -que, como se sabe, se estrenará este año- y la reforma electoral consecuente, ha sufrido modificaciones con relación a los comicios que hasta ahora se han realizado en el país.Ahora, las boletas pueden ser impresas en color sobre fondo blanco y tener fotografías (también a color) de los candidatos; y, como novedad saliente, el Estado financia el costo de esas impresiones. Pero son las fuerzas políticas las que deben ocuparse de la cuestión operativa de la impresión: conseguir y comprar el papel en la cantidad necesaria y contratar la imprenta que haga el trabajo.Las boletas que lleven las listas de las seis categorías que estarán en juego en estas elecciones (presidente y vice, senadores nacionales, diputados nacionales, gobernador y vice, legisladores provinciales e intendente, concejales y consejeros escolares) miden, vale señalar, 72 centímetros de largo por 19 centímetros de alto.A partir de ese esquema, los problemas que van encontrando en la práctica las fuerzas electorales son varios, según sostienen en la oposición.Uno de ellos tiene que ver con las dificultades para obtener el papel requerido –“tiene que ser un papel de mucho gramaje para resistir la impresión de las fotos a color”, se explica- y para encontrar las imprentas en condiciones de hacer el trabajo (se sostiene que “son pocas, porque no cualquiera puede efectuar correctamente estas impresiones con fotografías a color, y algunas están sobrepasadas de trabajo”).Cuentas que no cierran…Pero, según los reclamos opositores, uno de los problemas más graves tiene que ver con el costo de este operativo. Las normas electorales disponen que, como se dijo, el Estado lo cubra en base a “valores de mercado” del papel tipo obra de 60 gramos e impresión a cuatro colores, por una cantidad de boletas equivalente a “un padrón” en el caso de los comicios internos. Y desde esas pautas, el gobierno nacional ha hecho cuentas que, de acuerdo a las quejas que se escuchan, “no cierran”.Es que el Gobierno habría fijado un costo por boleta del orden 16 centavos y eso es lo que le pagará a cada espacio electoral, pero las cuentas de las fuerzas políticas dicen que el precio real rondaría por lo menos los 23 centavos, de modo que tendrán que cubrir el trabajo con fondos propios.El otro problema grave es la cantidad de boletas que financia el Gobierno. Como se dijo, las normas disponen que a cada fuerza electoral se le cubrirá, para las elecciones internas, el costo equivalente a “un padrón”, es decir, 27.800.000 boletas (una por cada ciudadano habilitado para votar) en el caso de los partidos que compitan en todo el país (que presenten candidatos presidenciales, por ejemplo), de las cuales 10.600.000 boletas corresponden a la provincia de Buenos Aires.“En una elección complicada como la que se viene, con el antecedente de lo que ocurrió en el 2007, cuando algunas fuerzas se dedicaron a ‘robar’ las boletas de otras en los cuartos oscuros durante toda la jornada, es necesario imprimir, para estas internas, no menos de una cantidad de boletas equivalente a por lo menos tres padrones, si se quiere tener la seguridad de poder reponer las boletas cada vez que éstas ‘se agoten’, en todos los cuartos oscuros a lo largo de toda la jornada”, señalan en la oposición. Un planteo que indica que una fuerza debería disponer de unos 83 millones de boletas en todo el país y unos 32 millones en la provincia de Buenos Aires.En rigor, aunque no lo confiesen en voz alta, las fuerzas políticas quieren tener boletas no sólo para que no falten en los cuartos oscuros, sino para distribuirlas “casa por casa” en los días previos a los comicios; un trabajo que consideran “clave” para sus campañas y para que la gente pueda ir a votar con la boleta a la que piensa sufragar ya en su poder.En este marco, y teniendo en cuenta sólo al distrito bonaerense, las fuerzas opositoras resumen sus quejas: 1)- hasta el lunes, el Gobierno no había depositado en las cuentas de las fuerzas electorales la cifra que debe financiarles por ley y según sus cálculos (1.700.000 pesos); 2)- la diferencia entre el costo real de las boletas y lo que cubrirá el Gobierno se eleva a 742 mil pesos por la cantidad de boletas autorizadas; y 3)- si se imprimiera la cantidad realmente necesaria para garantizar que no falten boletas, esa diferencia se elevaría a 2,3 millones de pesos.