Para el titular del bloque del Frente para la Victoria en la Cámara baja, Agustín Rossi, la oposición debería adoptar una postura más constructiva al momento de tratar el Presupuesto 2012. Además, entre otras cosas, habló del triunfo de Soria y el accionar del Congreso nacional.
(Cuarto Intermedio – 28 de septiembre de 2011)- ¿Qué reflexión le merece la victoria de Carlos Soria en Río Negro tras veintiocho años de gobiernos radicales en esa provincia?- En términos generales, la alternancia política después de tantos años de gobierno de un mismo signo político es bienvenida. Es indudable que el clima político generado después del 14 de agosto resultó clave para potenciar las chances del PJ en Río Negro. Lo interesante es que -después de 9 elecciones anticipadas para gobernador- nos encaminamos hacia octubre ganando una provincia importante como Río Negro. Contra el vaticinio de algunos medios de comunicación, el oficialismo logró revertir resultados adversos como los de Santa Fe y Ciudad de Buenos Aires. ¿Cómo ve posicionada a la Presidenta de cara a octubre?- No hay motivos a la vista para que algún argentino que haya votado a Cristina el 14 de agosto no lo haga el 23 de octubre. Así que el posicionamiento hacia octubre es óptimo, con una Presidenta muy activa en la gestión cotidiana y que, al mismo tiempo, les ofrece a los argentinos una visión de mediano plazo expresada en el Plan Estratégico Agroalimentario y el Plan Industrial 2020. El volumen de estadista que refleja la Presidenta -lo digo con mucho respeto hacia los otros candidatos- es enorme respecto a sus competidores. Cada vez queda más claro que lo mejor para todos los argentinos son cuatro años más de Cristina Presidenta.Faltando poco tiempo para el recambio legislativo, ¿cuál es su evaluación del accionar de la oposición como mayoría en la Cámara de diputados? – Creo que fueron dos años muy pobres en términos de labor parlamentaria. La conformación del “Grupo A” y el avasallamiento opositor del trabajo en comisiones, instaló una dinámica parlamentaria muy compleja donde fue casi imposible construir consensos. A los pocos meses de conformado el “Grupo A”, empezaron los problemas dentro de la oposición y no pudieron casi nunca más construir mayorías y conseguir quórum. La conformación del “Grupo A” fue negativo para el Congreso y las prácticas republicanas. Tras el ingreso del Presupuesto 2012 a la Cámara baja, ¿Cuáles son sus expectativas respecto a su votación? – Pude escuchar a muchos referentes opositores manifestando una posición más constructiva que la demostrada a fines del año pasado. Fue un error claro para la oposición haber obstruido el tratamiento del Presupuesto del año en curso. El Congreso le negó a Cristina lo que nunca le negó a Alfonsín, Menem, De la Rúa y Duhalde. Esperemos que este año reflexionen y que la oposición tenga una postura más constructiva y responsable. De todas maneras, el show que montaron sobre el tema Schoklender y la dilación en el tratamiento de la Ley de Extranjerización de Tierras, me hacen dudar de la buena fe opositora para facilitar la aprobación del Presupuesto 2012. Manifestó en un reportaje radial, que en los últimos dos años el Congreso ha funcionado deficitariamente con mayoría opositora. ¿Cómo lo imagina para el 2012? – Me imagino una Cámara de Diputados más activa, con un bloque oficialista que tenga una primera minoría clara y que construya mayorías a partir del consenso. Queremos sesionar con regularidad, cosa que no pudimos en estos años de mayoría opositora. ¿Le sorprendió que Felipe Solá se abriera definitivamente del bloque del Peronismo Federal?- A pesar de haberse ido del bloque del Frente Para la Victoria hace tiempo, nunca corté el diálogo con Felipe Solá y conocía varias de las reflexiones que luego emitió por los medios para justificar su renuncia al bloque del Peronismo Federal. Por lo tanto, la actitud de Felipe no me tomó por sorpresa. Si hubo en él un proceso de reflexión que le hizo cambiar de opinión y tener una posición de mayor reconocimiento y proximidad con la gestión de Cristina, bienvenido sea. Estoy seguro que hay más diputados que están con la misma idea. En líneas generales, las experiencias indican que las alianzas en política no suelen llegar a buen puerto, o bien son de tipo circunstanciales en nuestro país. ¿Cree entonces que la Presidenta, en el caso de resultar reelecta, opte esta vez por generar más consensos en lugar de alianzas con las demás fuerzas o agrupaciones?- La supuesta falta de diálogo y de construcción de consensos es una verdadera falacia. Si algo expresa el 50 % obtenido por Cristina en agosto, es una enorme, amplia y heterogénea base de sustentación que legitimaron sus políticas. Salvo temas muy puntuales, las directrices fundamentales de nuestra gestión de gobierno no son puestas en duda por la dirigencia opositora y demuestran que tienen un alto consenso social. Además, el Frente para la Victoria es un espacio político amplio y plural, con una fuerte presencia del Partido Justicialista, sus gobernadores e intendentes; donde participan también partidos aliados que recogen la tradición nacional y popular; con los trabajadores organizados en la CGT y la CTA; vastos sectores empresarios; y con una fuerte movilización juvenil. Para que toda esta diversidad se exprese en un mismo sentido, se necesitan ideas aglutinadoras que generen consensos y con un liderazgo indiscutible como el que ejerce Cristina. Así que el consenso es siempre imprescindible. Por otra parte, en estos años de trabajo parlamentario, siempre construimos marcos de alianzas muy amplios que le dieron a todas las leyes sancionadas un fuerte consenso y legitimidad. Seguramente vamos a seguir en este camino.