Un sector opositor quiere restar facultades al vicepresidente del cuerpo José Ottavis. Fuerte rechazo de todo el oficialismo.
(Cuarto Intermedio – 30 de diciembre de 2011)- El poder interno que acumularon los representantes de La Cámpora en la Legislatura quedó en el centro de una polémica que incluyó fuertes reacciones del oficialismo. El debate se disparó a partir de un proyecto impulsado por la oposición que propone recortar atribuciones a la Vicepresidencia del cuerpo, hoy en manos de José Ottavis, uno de los líderes de la agrupación juvenil kirchnerista.Concretamente, dispone que a través de una modificación del reglamento de la Cámara se elimine el “poder de firma” con que cuenta ese cargo para revisar todos los actos administrativos de la Presidencia.El proyecto, impulsado por el diputado del bloque Celeste y Blanco Mauricio D’Alessandro, generó un amplio e inmediato rechazo de todos los sectores del oficialismo, desde donde se denunció que la iniciativa apunta a “generar divisiones” en el Frente para la Victoria y del propio presidente de la Cámara, Horacio González, quien recordó que esa bancada -que responde políticamente a Francisco De Narváez- acompañó con su voto hace tres semanas el actual esquema de autoridades.Es que el recorte en las facultades que propuso D’Alessandro, apunta básicamente a la situación de Ottavis, quien fue designado vicepresidente de la Cámara en el marco de un acuerdo entre la Casa Rosada y algunos sectores del oficialismo, luego de una pulseada con el sciolismo, que inicialmente aspiró a quedarse con ese sillón.La Vicepresidencia de la Cámara cuenta con poder de firma y de veto no sólo sobre la dinámica legislativa, sino también sobre los actos administrativos y sobre el movimiento de los 790 millones de pesos que el cuerpo se asignó como presupuesto para 2012. Una diferencia sustancial con respecto a las facultades de las vicepresidencias Primera, Segunda y Tercera, que actualmente ocupan diputados de la oposición.El proyecto del diputado denarvaísta propone que sean modificados los artículos 29 y 30 del reglamento interno, para que de esa manera “el control” de los actos administrativos “sea ejercido por todos los vicepresidentes del cuerpo, y no sea solamente incumbencia del oficialismo convirtiendo a la mayoría legislativa en meros espectadores del funcionamiento de la Cámara”, según su texto.“La realidad política de la actual composición de la Cámara hace que el oficialismo no deba ejercer las funciones de control y auditoría sobre sí mismo”, dijo D’Alessandro, que aseguró además haber recibido adhesiones “de unos 30 diputados de la oposición, que llamaron para decir que respaldaban esta idea”.Sin embargo, ninguna bancada opositora fijó postura pública con respecto al proyecto, mientras desde el oficialismo salían en bloque a marcar rechazos. El presidente del bloque del FpV, Juan De Jesús, lo vinculó directamente con una “jugada política” para “generar divisiones” en la bancada, que en las últimas semanas vivió tensiones internas por la elección de autoridades. “Es una jugada política. Piensan que pueden dividir al bloque, pero aún con nuestros estilos estamos unidos”, dijo De Jesús, quien reconoció que en el espacio que conduce “hay distintas vertientes”, pero afirmó que “no hay diferencias”.