Así lo dispone el proyecto que envió el Ejecutivo de la provincia de Buenos Aires al Senado y que viene siendo reclamado por los municipios.
(Cuarto Intermedio – 8 de febrero de 2012) – Los empleados municipales que actualmente desempeñan tareas relacionadas o complementarias a la seguridad pública, podrán incorporarse a la Policía de Prevención que impulsa el gobierno bonaerense para las comunas
Así quedó establecido en el proyecto de conformación de la nueva fuerza uniformada local que la administración de Daniel Scioli giró en los últimos días a la Legislatura junto con otra iniciativa que propone la creación de la Policía Judicial.
Estos agentes -que vienen realizando tareas de inspección y patrullajes pero que no tienen rango policial- podrán sumarse a la fuerza luego de realizar una capacitación en Institutos Policiales.
De esta manera, el Ejecutivo provincial busca sumar más efectivos a la nueva fuerza policial que, en principio, operará en distritos de más de 70 mil habitantes. De todos modos, el gobierno provincial podrá habilitar el funcionamiento de este cuerpo policial en comunas con menos habitantes.
La creación de estas fuerzas locales es un viejo anhelo de varios intendentes que, si bien no serán los jefes policiales -el mando seguirá a cargo de un uniformado-, podrán diseñar las políticas preventivas y las acciones estratégicas de la Policía de Prevención.
En rigor, la policía seguirá dependiendo orgánica y administrativamente de las Jefaturas Departamentales. Pero cada fuerza municipal será coordinada logísticamente por un gabinete que presidirá el intendente.
En cuanto a sus funciones, serán las de realizar tareas de patrullaje y vigilancia; prevención primaria; cesar la comisión de delitos y contravenciones e impedir sus consecuencias; colaborar en la fiscalización de faltas de tránsito y mantener el orden y la seguridad pública.
También se establece que la nueva fuerza no cumplirá tareas de custodia de objetivos fijos ni de personas ni albergará detenidos en sus bases operativas.