Si no llegan fondos del gobierno nacional, la Provincia de Buenos Aires debería desdoblar el cronograma.
El gobierno de Daniel Scioli transita horas decisivas para determinar si pagará sueldos y aguinaldo en tiempo y forma, o deberá apelar a desdoblar el cronograma y diferir la fecha en que cancelará una de las dos obligaciones.
La cuestión central es que la Provincia aún no tiene certezas acerca de si recibirá ayuda nacional para hacer frente esa obligación y, en caso de que llegue el auxilio, de qué volumen será.
El gobierno provincial necesita un aporte cercano a los 3.000 millones de pesos para poder pagar en fecha sueldos y aguinaldo a los empleados estatales, docentes y policías.
A mitad de año, como es habitual, los dos conceptos salariales se pagan de una vez. Pero en las últimas horas comenzó a rodar el rumor de que la Provincia se vería obligada a diferir el pago del aguinaldo para la segunda o tercera semana de julio si el gobierno nacional realiza un giro de fondos inferior al esperado.
Producto de la difícil situación financiera por la que atraviesa, la administración provincial requiere mes a mes un aporte nacional para completar el pago de salarios. Pero en esta ocasión el requerimiento es extra producto de que hay que pagar el aguinaldo.
La urgencia tiene que ver con que el próximo lunes -primer día hábil del mes-, debe comenzar el cronograma de pagos a los activos y a la Provincia no le queda demasiado tiempo para definir cómo y en qué fecha se realizará la operatoria.
La necesidad de contar con un auxilio financiero adicional llega para la administración de Daniel Scioli en el marco de un fuerte conflicto político con la Casa Rosada, que se profundizó luego de que el mandatario blanqueara su intención de ser candidato presidencial en 2015, aún cuando condicionó su intención a que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner no logre una autorización constitucional para continuar al frente del Ejecutivo nacional.
Frente a esta situación de fuerte tensión, en la Provincia esperan que la Casa Rosada cumpla aquél compromiso de asistencia financiera que Scioli habría logrado a partir de la firma del decreto que dispuso el revalúo de las tierras rurales y que le permitirá a la Nación embolsar fondos adicionales por el Impuesto a los Bienes Personales que pagan los productores.
En los últimos días, el vicegobernador Gabriel Mariotto aseguró, en ausencia de Scioli, que sueldos y aguinaldo se pagarían “en tiempo y forma”. Esa definición trajo cierto alivio a los funcionarios bonaerenses.
Pero en el tiempo de descuento para definir el cronograma, todavía los fondos no llegaron, mientras crecen las versiones acerca de que la Nación sólo asistiría en parte -se habla de unos 250 millones de pesos- a la Provincia. Si eso ocurriera, diferir el pago del aguinaldo sería una posibilidad cierta.