El abogado Gregorio Dalbón amplió su rango de embestidas del juez federal Claudio Bonadío, al ministro de Planificación Federal Julio De Vido.
Querellante en la causa por la tragedia de Once, el letrado ratificó en las últimas horas una denuncia por “abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público” contra el hombre fuerte del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.
El juez Rodolfo Canicoba Corral quedó a cargo del expediente en el que Dalbón imputa a De Vido por la “falta de controles” en la ex concesionaria Trenes de Buenos Aires (TBA). Según el abogado, la conferencia de prensa en la que se anunció la quita de la concesión a TBA fue un acto de “confesión” de De Vido sobre los supuestos delitos que habría cometido.
Dalbón argumentó que la rescisión del contrato con la firma TBA “fue dispuesta como consecuencia de una serie de incumplimientos de la empresa concesionaria que recién pudieron ser precisados y confirmados a través de la intervención técnica y operativa, indicando que desde el 2003 hasta el momento de la rescisión le fueron impuestas a esta empresa 150 multas”, explicó el abogado en su querella.
“La conducta en la que ha incurrido el ministro de Planificación conforma la inexcusable comisión de los delitos de abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público puesto que las expresiones llevan a la absoluta convicción de que el mismo resulta penalmente responsable por no haber ejecutado de manera oportuna las leyes cuyo cumplimiento le incumbieron”, resumió.