La falta de precipitaciones y de humedad en los suelos en una vasta área de la provincia de Buenos Aires complica las posibilidades de desarrollo que requieren los lotes sembrados con trigo en lotes.

Así se advirtió en un informe técnico el Ministerio de Agricultura de la Nación, que dio a conocer incluso que en algunos distritos hace más de dos meses que no se producen precipitaciones.

En los campos trigueros de Lincoln, en el noroeste bonaerense, hace nueve semanas que no se registran lluvias, a lo que se le suman bajas temperaturas y heladas, que junto a la acción de los vientos se concretó la pérdida de humedad superficial en los suelos, sostiene el informe.

También en Bragado se sufrieron en los últimos días heladas que aceleraron el proceso de secado de los suelos, y allí los especialistas admiten la necesidad de contar con lluvias de moderada intensidad para mantener cargados los perfiles y seguir en condiciones ideales para los cultivos trigueros.

Por ello, las autoridades del Ministerio de Agricultura reconocieron en sus informes que el avance de la siembra de trigo ronda el 99 por ciento sobre un total de 4 millones de hectáreas.

En el orden nacional, los datos oficiales expresaron que un 9 por ciento de la superficie implantada se encuentra en “emergencia de plántulas” y el 91 por ciento restante en macollaje.

“La falta de humedad superficial se hace sentir en varias zonas del país”, consideró el último informe de Agricultura referido específicamente al trigo, del que se indicó que un 88 por ciento de los cultivos muestran un estado de bueno a muy bueno, y el otro 12 por ciento, un estado de regular a malo.

En campos de General Madariaga, en el sudeste, ya se finalizó con la siembra y el trigo está atravesando la etapa de desarrollo foliar e inicio de macollaje.

Mientras que en el centro-este, en una franja que une Mar Chiquita, Rauch y Ayacucho, “la situación hídrica es complicada” ya que hace más de “dos meses” que no se registran precipitaciones de importancia.

En la última semana, en Pehuajó, en el noroeste bonaerense, las intensas heladas afectaron levemente a las plantas recién emergidas, aunque se estima que esto no afectará su posterior desarrollo, en función de la “buena condición hídrica” que experimentan los suelos.

Asimismo, sin que se registraran lluvias durante la última semana en Pigüé, las bajas temperaturas registradas hacen muy lento el comienzo del desarrollo de los trigos sembrados en lotes de ese distrito.