La Corte Suprema de Justicia eludió un primer pronunciamiento en la causa en la que se investiga la desaparición, hace 39 años, del conscripto riojano Alberto Agapito Ledo.
En junio pasado, en el aniversario de la desaparición de Ledo, organismos defensores de los derechos humanos y la familia de la víctima presentaron acciones de Habeas Corpus para determinar qué había ocurrido con él.
El recurso apuntaba a “hacer cesar la condición de desaparecido de Ledo, y que el Estado en su conjunto ponga el máximo empeño y compromiso en dar una respuesta a la sociedad”.
Pero el juez federal tucumano Daniel Bejas rechazó la acción, “por no ser el canal idóneo para encausar la búsqueda”.
El Habeas Corpus fue elevado a la Cámara Federal, que no conseguía reunir un mínimo de tres jueces para pronunciarse, por lo que fue designado como subrogante un secretario del propio tribunal, Marcelo Herrera.
Él, y los camaristas Ernesto Wayar y Marina Cossio, confirmaron el rechazo del Habeas Corpus, pero el fiscal general Antonio Gustavo Gómez objetó la validez de la designación y pidió el “per saltum” a la Corte. El recurso buscaba que el máximo tribunal se pronunciara sobre la legitimidad de la ley de subrogancias y, al mismo tiempo, se pronunciara sobre la desaparición de Ledo.
Pero el procurador general adjunto, Eduardo Casal, “desistió” del recurso de su colega tucumano Gómez, con lo que la Corte se quedó sin posibilidad procesal de emitir un fallo.
“El Procurador Fiscal que conoció del caso expresó que desistía de la instancia revisora promovida ante esta Corte por el Fiscal General ante la Cámara Federal de Apelaciones de Tucumán. Por ello, se tiene por desistido el recurso extraordinario por salto de instancia”, suscribieron los jueces Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco, Carlos Fayt y Juan Carlos Maqueda.