La defensa de Pérez Corradi presentó la acción judicial ante el presunto “agravamiento de las condiciones de detención”, derivados del supuesto incumplimiento de las condiciones alimentarias recomendadas por médicos que lo atendieron después de una huelga de hambre.
Pérez Corradi está alojado en el Edificio Centinela de Gendarmería Nacional Argentina, desde donde planteó que “sus condiciones de detención se habían agravado ya que no se cumplía con la dieta de 3.000 calorías dispuesta por profesionales del Hospital Posadas el 16 de marzo, luego de una huelga de hambre”.
El detenido sostuvo que la dieta “debería constar de tres latas de atún, huevos, dos o tres bifes en cuatro comidas” y explicó además que “la verdura le ocasionaba mal humor”.
Pérez Corradi aclaró que “lo único que deseaba era que se cumpliera con el régimen propuesto en el nosocomio mencionado”.
Los camaristas Marcelo Lucini y Mariano González Palazzo replicaron que Pérez Corradi recibe en prisión “una dieta equilibrada, reemplazándose solo el atún exigido por carne vacuna, huevos, pollo, pescado, frutas y vegetales”.
Ello “cubre los nutrientes necesarios para una buena alimentación”, añadieron, al ratificar el rechazo del habeas corpus.