Las dobles candidaturas consisten en que alguien pueda postularse, al mismo tiempo, para gobernador y para legislador provincial. Esto había sido eliminado años atrás por el propio peronismo, pero ahora hay un giro de 180 grados sobre aquella decisión.
Los partidos más chicos son los beneficiados con las dobles candidaturas, porque no siempre tienen tantos nombres con peso propio para la boleta.
Desde Cambiemos rápidamente advirtieron que la idea es fortalecer las posibilidades de los terceros y cuartos partidos, de manera de reducir la polarización que ya se insinúa entre la alianza que encabezan la UCR y el PRO, y la coalición Unión por Córdoba, que tiene por principal socio al Partido Justicialista.
González salió a desmentir esa idea, asegurando que se busca aplicar “un criterio racional y de equidad en situaciones que son similares porque son cargos ejecutivos en ambos casos”.
González, la segunda autoridad política de Córdoba por la licencia del vicegobernador Martín Llaryora (que ahora es diputado nacional), consideró que “es bueno darles la posibilidad a los partidos más chicos de la provincia de que puedan participar dándole mayor fortaleza a su lista de legisladores con el candidato a gobernador”.