Los condenados son el argentino Juan Manuel Correa y el boliviano Luis Sillerico Condori, quienes fueron condenados en junio de 2016 como responsables por el episodio ocurrido el 30 de marzo de 2006 en un taller de costura situado en Luis Viale 1.271, habilitado para cinco operarios pero donde vivían y trabajaban unas 60 personas, que percibían entre 0,70 y 1,20 pesos por cada pantalón que confeccionaban.
La Corte, con los votos de los jueces Elena Highton de Nolasco, Juan Carlos Maqueda, Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz, rechazó una última apelación y le dio a las condenas fuerzas de cosa juzgada.
La magnitud del hecho provocó que buena parte del gabinete de la Ciudad de Buenos Aires, encabezados por el Jefe de Gobierno de entonces, Jorge Telerman, y autoridades diplomáticas bolivianas concurrieran al lugar, ocasión en la que al Jefe del Ejecutivo porteño aludiera a las “prácticas salvajes y siniestras” de las condiciones de trabajo de las víctimas.
Como consecuencia del incendio, murieron Juana Vilca Quispe, de 25 años y encinta; Luis Quispe Cornejo y Harry Rodríguez Gómez, ambos de tres; Rodrigo Quispe Carvajal, de cuatro; Elías Mendoza Carvajal, de diez, y Wilfredo Quispe Mendoza, de 15, todos de nacionalidad boliviana.