Previo a la apertura de los mercados, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, ofreció una conferencia de prensa para explicar el alcance de las medidas adoptadas durante las últimas horas, que incluyeron la designación del ahora ex ministro de Finanzas, Luis Caputo, como nuevo presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA) tras la renuncia de Federico Sturzenegger (la cartera que comandaba Caputo volverá nuevamente bajo la órbita de Hacienda).
“Que un miembro del poder Ejecutivo sea nombrado titular del Banco Central no creo que viole la independencia del banco”, sostuvo, al tiempo que señaló que durante la noche del jueves mantuvieron contactos tanto con Christine Lagarde como con otros funcionarios del FMI, quienes le brindaron su apoyo ante los cambios que está instrumentando el Gobierno nacional en el equipo económico.
Por otra parte y sobre el acuerdo con el organismo internacional de crédito, el funcionario nacional dijo que el FMI no es una solución mágica y recordó que el país tiene problemas económicos desde hace 70 años. “La solución al problema de los argentinos depende de nosotros”, afirmó.
En relación a la situación económica, Dujovne aseguró que se está trabajando para normalizar el mercado cambiario y que la volatilidad que tuvo la moneda responde a varios factores, siendo uno de ellos la confianza, por lo que destacó como un paso fundamental la designación de Caputo al frente del BCRA para recuperarla.
No obstante, reconoció que no puede decir cuándo intervendrá el BCRA, aunque remarcó que se tiene un régimen de flotación y que se puede intervenir. Asimismo, anticipó que están reemplazando las letras del Banco Central por letras del Tesoro de más largo plazo, proceso que irán haciendo gradualmente.
“A pesar del cambio de nombres, el programa económico del Presidente Mauricio Macri sigue siendo el mismo. Estamos seguros de que vamos a ir disminuyendo abruptamente la volatilidad que hemos visto”, auguró.
Consultado nuevamente sobre los pormenores del acuerdo con el FMI, el ministro comentó que la Argentina tiene acceso a esos fondos y que es todo dinero desembolsable. Además, enfatizó que no aumentaron la deuda y que, por el contrario, abarataron el costo del financiamiento.
“No hemos podido bajar la inflación al ritmo que hubiésemos deseado. Pero esta gestión está comprometida con la defensa de los argentinos y de los más vulnerables”, agregó.