En acuerdo con todos los bloques políticos y con el objetivo de debatir una serie de iniciativas para hacerle frente a la crisis sanitaria por el coronavirus, la Legislatura porteña llevará a cabo una sesión especial que no se llevará a cabo en el habitual recinto de sesiones, sino en el Salón Dorado que dispone de mayor espacio disponible para tomar todas las medidas de prevención sanitaria correspondientes.
Durante el encuentro que fue convocado por el vicepresidente primero del cuerpo, Agustín Forchieri, se tratará la ratificación de los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) que declaran la emergencia sanitaria y la extensión de licencias y que amplían las penas que el Código de Faltas determina para los infractores de normas relacionadas con la prevención de enfermedades transmisibles; la prohibición de circular y la violación de precios y tarifas; y las estrategias presupuestarias y financieras que permitan solventar inversiones vitales en insumos médicos y personal.
Asimismo, también se tratará una iniciativa que garantice el funcionamiento de la actividad parlamentaria en caso de que se decida continuar con las medidas de aislamiento social preventivo y obligatorio.
Por otra parte, las autoridades legislativas aclararon que el acceso al Salón Dorado estará estrictamente limitado a diputados, funcionarios parlamentarios y personal imprescindible previamente justificado, a quienes se les tomará la temperatura corporal previo a que hagan sus ingresos al Palacio.
El espacio, según informaron, fue adaptado para el encuentro ya que las bancas (sillas) de los legisladores estarán separadas por un metro y medio unas de otras, a fin de respetar la distancia social preventiva.
Además, habrá agua y alcohol en gel debajo de cada escaño y el uso de la palabra se hará desde un atril, por lo que cada vez que un diputado finalice su alocución se cambiará todo el kit descartable que recubrirá el micrófono y se esterilizará nuevamente el mismo.
La votación de los proyectos, en tanto, será de manera nominal.