El jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel; junto al ministro de Justicia y Seguridad, Marcelo D’Alessandro; y su par de Gobierno, Jorge Macri, ofrecieron una conferencia de prensa para comunicar que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires recusó al juez Roberto Gallardo por haber dictado “un fallo funcional a la política y al kirchnerismo” luego de suspender el sistema de reconocimiento facial a partir de una causa en la que se investiga la utilización irregular de datos biométricos de las personas.
“Tenemos un plan integral que tiene que ver con la capacitación de la policía, la incorporación de equipamiento, el uso de la tecnología, el uso correcto de las estadísticas. Gracias al uso de todas esas herramientas es que hoy en la Ciudad de Buenos Aires tenemos las tasas de delito más bajas en los últimos 27 años”, expresó Miguel.
En esa línea, además, agregó que no van a escatimar en el uso de ninguna herramienta para favorecer la seguridad en la Ciudad, y que continuarán insistiendo con las taser, al recordar que hace más de un año las compraron pero que sin embargo una nueva traba por parte del Gobierno nacional les está impidiendo incorporarlas y utilizarlas como herramientas válidas para la Policía de la Ciudad.
“El sistema de reconocimiento facial permitió identificar y poner a disposición de la Justicia a 1.695 delincuentes que estaban prófugos, tenían un pedido de captura; la Justicia quería que estuvieran detenidos. Vamos a acudir a la Justicia hasta lograr que restablezca el sistema de reconocimiento facial, que es tan importante para la seguridad de 3 millones de porteños y de millones de argentinos que vienen todos los días a la Ciudad”, enfatizó el jefe de Gabinete porteño, quien confirmó que presentaron la recusación del juez Gallardo para apartarlo de la causa por su “flagrante parcialidad” y por “haber dictado un fallo funcional a la política y al kirchnerismo”.
A su turno, Macri planteó que lo que están discutiendo es la “lógica del kirchnerismo constante de querer emparejar para abajo”, al tiempo que los acusó de que cuando hay un sistema que funciona lo atacan para que no se note que ellos no tienen gestión.
“En lugar de copiar ese sistema, el kirchnerismo lo ataca para que deje de funcionar, en una clara intencionalidad de quitarle autonomía y seguridad a esta ciudad. En esto se nota una clara diferencia: el kirchnerismo, desde que llegó al Gobierno, buscó todas las excusas posibles para liberar presos, hasta en la pandemia. Nosotros, en ese mismo período, implementamos un sistema exitoso que nos permitió detener más de 1.600 delincuentes como narcotraficantes, asesinos y violadores”, graficó el funcionario porteño.
