En el marco de su habitual contacto con la prensa, la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, aseguró que todos en el Gobierno acordaron con el diagnóstico de que se está en un período donde hay una “excesiva rentabilidad empresaria”, y destacó el objetivo central del “plan de estabilización” que se está llevando adelante para que la carga de la distribución no termine siempre cayendo sobre las familias y los más vulnerables.
En ese sentido, la funcionaria dijo que los índices de la incidencia de la pobreza y de la indigencia del primer semestre de 2022 publicados recientemente por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) son datos que “podrían ser alentadores” en el sentido de que está disminuyendo la pobreza por tercer semestre consecutivo, y que “nos estamos acercando a las cifras pre-pandemia”.
“Son números altísimos que no nos conforman, y entendemos que poder ir disminuyendo la pobreza tiene que ser un camino y un sendero que se profundice y se acelere”, reconoció no obstante.
Respecto a la tasa de indigencia, opinó que tiene un impacto “muy fuerte” el alza del precio de los alimentos que, dentro de la inflación general, es la que más influye en las canastas de las familias, y por eso el compromiso y el trabajo de todo el Gobierno, en conjunto, para que los salarios crezcan.
Por tal motivo, remarcó la “necesidad” imperiosa de una redistribución del ingreso, así como también de un fortalecimiento del poder adquisitivo de los salarios y, de alguna forma, de ponerse de acuerdo en que la rentabilidad excesiva por parte de las empresas no forma parte de una comunidad en la cual todos quieren vivir.
“Tal como expresó el ministro de Economía, Sergio Massa, en la Cámara de Diputados, uno de los objetivos centrales del Gobierno en este momento es que el plan de estabilización, que evidentemente está funcionando y se está llevando adelante, pueda profundizarse hacia lograr un mayor poder adquisitivo de los salarios y una reducción al mismo tiempo de la inflación para que podamos lograr, más temprano que tarde, unos números que nos alienten un poco más con respecto a la pobreza y a la indigencia”, completó Cerruti.