La persona votada por la Cámara es Fernando Basanta, un militante de 42 años de la agrupación La Cámpora, quien antes se desempeñara como ministro de Gobierno de Alicia Kirchner. Además, es un dirigente de confianza de Máximo, el hijo de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
La Constitución de Santa Cruz establece como uno de los requisitos para integrar el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) el ejercicio de la profesión durante seis años como mínimo. Basanta, sin embargo, nunca trabajó como abogado y no tiene matrícula.
Desde el bloque del Frente de Todos (FdT), el diputado Martín Chávez, lo justificó argumentando con jurisprudencia de otras provincias, y habló de las cualidades que, dijo, tiene Basanta para ocupar una vocalía del máximo organismo de Justicia de Santa Cruz.
Al momento de votarse la designación, los diputados de la oposición se abstuvieron, y protestaron porque le habían negado la palabra al radical Daniel Roquel. Sí dejaron en claro que entienden que la nominación de Basanta es inconstitucional.
Dieciséis legisladores del Frente de Todos votaron a favor, cuatro en contra, y hubo tres abstenciones.