A través de la Resolución 9/2025 publicada en el Boletín Oficial, el Gobierno nacional eliminó trabas para la producción local de vinos con baja graduación alcohólica o “cero alcohol”.
Para tal fin, el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) habilitó el uso de tecnologías y equipos de desalcoholización que cuenten con certificaciones internacionales emitidas por organismos reconocidos en países con altos estándares en seguridad alimentaria, eliminando la restricción que permitía sólo el uso de equipos autorizados por ese organismo.
“Esta resolución facilita los procesos para la desalcoholización del vino. Además de ser una tendencia mundial, con tantos accidentes viales por alcohol, esto era un pendiente urgente”, manifestó sobre la medida el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger.
La normativa, cabe señalar, se basa en la Ley General de Vinos N°14.878, que autoriza al INV a establecer y modificar las técnicas permitidas en la elaboración de vinos, garantizando siempre la autenticidad del producto y el cumplimiento de estándares de calidad.
Para acceder a esta flexibilización, entonces, los productores deberán presentar una declaración jurada ante el INV, acreditando tanto la certificación internacional de los equipos utilizados como la preservación de las propiedades esenciales del vino.
Por su parte, el organismo se reserva el derecho de realizar auditorías, inspecciones y verificaciones a fin de asegurar el cumplimiento de las disposiciones y proteger la calidad del producto final.