La fiscal Cristina Caamaño Iglesias Paiz, quien pidió la indagatoria del sindicalista José Pedraza por su presunta responsabilidad en el crimen de Mariano Ferreyra, el militante del PO asesinado por una patota de la Unión Ferroviaria, carga sobre sus espaldas con una rica historia.
(Cuarto Intermedio – 3 de diciembre de 2010)- Ideológicamente de izquierda, la mujer tiene en su despacho una foto en la que se la ve posando junto a Fidel Castro. No sólo eso: sobre una de las paredes está reproducido el último discurso que Salvador Allende pronunció por una radio clandestina poco antes de que los aviones de Augusto Pinochet bombardearan La Moneda.Pero además, es madre de un sobreviviente de la tragedia de Cromañón. “Madre y media”, en realidad, porque el hijo de un matrimonio amigo que se había radicado en el exterior estaba viviendo con ella y con su hijo mayor, y también sobrevivió al infierno de la discoteca del barrio de Once.Buena parte de su carrera judicial la realizó en trabajos en cárceles y, de hecho, uno de los siete detenidos por el crimen de Ferreyra se encontró en la cárcel con un reo que lo tranquilizó: “Cristina es buena gente. Si te tiene que cagar, te va a cagar porque hay algo. Pero si no tenés nada que ver, quedate tranquilo que zafás”.