Después te revoco

La espectacularidad es una vocación para algunos jueces. Y los 15 minutos de trascendencia, una aspiración casi ineludible que algunos sienten como un derecho.   ... Por Cuarto Intermedio

La espectacularidad es una vocación para algunos jueces. Y los 15 minutos de trascendencia, una aspiración casi ineludible que algunos sienten como un derecho.   

(Cuarto Intermedio – 28 de julio de 2011)- Sólo así se explica el fallo que, rozando la censura previa, prohibió la difusión, publicación y exhibición de fotografías de la actriz Juana Viale y su marido, el actor chileno Gonzalo Valenzuela, “en estado de desnudez e íntimo”.El juez civil Juan Manuel Converset comparó la difusión de las fotos de la mediática y escandalosa pareja a punto de tener sexo con la publicación de la imagen de Ricardo Balbín moribundo. La Constitución Nacional rechaza la censura previa, el Código Penal recientemente modificado achicó el margen de punibilidad de los delitos de calumnias e injurias pero quedó en pie la posibilidad del resarcimiento civil por “daños y perjuicios”. La mejor manera de hacer respetar el derecho a la privacidad es punir el daño con una fuerte sanción económica. Pero para ello debe acreditarse un daño, y que ese daño causó un perjuicio a alguna persona.La abogada Mariana Gallego, integrante del estudio del mediático abogado Mauricio D’Alessandro, consiguió que un juez pusiera nuevamente en vigencia la censura por anticipado por un tema exclusivamente privado. Lo inexplicable es que la difusión de una imagen habría sido producto de un delito, el hurto o robo de un teléfono celular, y de otro potencial, cual es la obtención y difusión de su contenido. Entonces, habiendo un delito para investigar y castigar, la Justicia civil de primera instancia optó por la solución más fácil y menos comprometida.Los jueces de la Cámara del Crimen esperan que se reanude la actividad tras la feria judicial para revocar la medida. Lo harán, si se les presenta la oportunidad. Pero no es seguro que ello ocurra, porque para eso la medida cautelar que prohíbe la difusión de las imágenes debería ser apelada. Y hasta ahora nadie ha asomado la cabeza para hacerlo.