Parece el colmo de la precarización laboral, pero la realidad es la que es y no la que debería ser. Y la realidad indica que el Estado también “negrea” a trabajadores. 

(Cuarto Intermedio – 4 de agosto de 2011)- Ya no el Estado como administración pública paquidérmica, sino también las fuerzas armadas, que se jactaban de apuntar a lo “poco y eficiente” y terminaron centuplicando los gastos estatales, incluyendo en ello la deuda externa.La Cámara Laboral acaba de condenar a la Fuerza Aérea a indemnizar por despido a una organizadora de fiestas y eventos a la que mantuvo trabajando durante cuatro años con contratos temporales y luego le cambió el destino y le rebajó el sueldo, hasta que la mujer -harta del destrato- se dio por despedida. La estrella de la trabajadora comenzó a apagarse cuando quedó embarazada. Ya se sabe que a los empleadores les molesta que sus empleadas mujeres tengan hijos… La mujer trabajaba para el Círculo de la Fuerza Aérea, una suerte de entidad recreativa de la aeronáutica que “cuenta, en su sede central, con un área de organización de eventos, dado que posee un salón destinado a esos fines, y es para ello que contrató a la actora, quien se desempeñó bajo contratos -a plazo- sucesivos desde febrero de 2003 hasta diciembre de 2006, es decir, por espacio de cuatro años”.La Cámara Laboral consideró que esa situación era claramente anormal y escondía una relación laboral que no había sido blanqueada: “Nos hallamos frente a contrataciones efectuadas por el Estado Nacional de modo irregular, dado que se realizaron al margen del marco normativo vigente para contratar personal”.