Juez “lorquiano” preocupado por la salud

En un poco frecuente tono de redacción, el juez en lo comercial Eduardo Malde incluyó un fragmento de una poesía de Federico García Lorca para... Por Cuarto Intermedio

En un poco frecuente tono de redacción, el juez en lo comercial Eduardo Malde incluyó un fragmento de una poesía de Federico García Lorca para explicar por qué adoptaba la decisión contenida en su resolución.

 (Cuarto Intermedio  – 21 de mayo de 2009)- Se trata de una nueva prórroga, hasta mitad de año, de la atención y el suministro de medicamentos a los ex afiliados a la empresa de medicina prepaga que funcionaba en el quebrado Hospital Francés.En la página cinco de la resolución, el juez -quien viene extendiendo la atención médica desde finales del año pasado, priorizando la salud de los ex afiliados por sobre cualquier otra cuestión- incluye la poesía lorquiana en un velado tono de crítica a la gestión sobre el hospital Francés.Tras explicar qué alternativas pudieron barajarse para evitar el colapso, el magistrado concluye que “aquella posibilidad hoy no existe”, embiste con Lorca:Verde que te quiero verde. Verde viento. Verdes ramas…Compadre, quiero cambiar mi caballo por su casa, mi montura por su espejo, mi cuchillo por su manta. Compadre, vengo sangrando, desde los montes de Cabra. Si yo pudiera, mocito, ese trato se cerraba. Pero yo ya no soy yo, ni mi casa es ya mi casa. Compadre, quiero morir decentemente en mi cama. De acero, si puede ser, con las sábanas de holanda. ¿No ves la herida que tengo desde el pecho a la garganta? Trescientas rosas morenas lleva tu pechera blanca. Tu sangre rezuma y huele alrededor de tu faja. Pero yo ya no soy yo, ni mi casa es ya mi casa.

Lorca escribió ese “Romance Sonámbulo” el 2 de agosto de 1924, seguramente sin pensar que alguna vez un juez argentino lo utilizaría para explicar la muerte de un hospital.