Según precisaron desde la administración porteña, el procedimiento establecido en el nuevo protocolo tiene como objetivo aportar a los educadores las herramientas necesarias para prevenir situaciones de violencia de género y discriminación basada en la orientación sexual e identidad de género, o su expresión en la cual intervenga algún integrante de la comunidad educativa.
Asimismo, también fija pautas de intervenciones claras y estandarizadas en caso de que se lleguen a concretar situaciones como las mencionadas.
El protocolo, además, se aplicará en las escuelas secundarias y establecimientos terciarios en cualquiera de sus modalidades de la Ciudad, siendo su aplicación complementaria ya que no reemplazará ninguna normativa específica vigente en materia de niñez, adolescencia y género.
A su vez, se enmarca en la legislación vigente en dichas temáticas, en especial: la Ley Nacional N° 26.061 y la Ley local N° 114 -ambas de protección integral de derechos de niñas, niños y adolescentes-; la Ley Nacional N° 26.485, de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres; y la Ley Nacional N° 26.743, de identidad de género.
La firma de la resolución conjunta fue encabezada por el vicejefe de Gobierno, Diego Santilli; la ministra de Educación e Innovación, Soledad Acuña; su par de Desarrollo Humano y Hábitat, Guadalupe Tagliaferri; y la Presidenta del Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, Karina Leguizamón.
También participó el titular de la Defensoría del Pueblo, Alejandro Amor, dado que el organismo que preside participó en su elaboración.