Tras casi 20 horas de un debate que se vio interrumpido en varios tramos a raíz de los incidentes que se registraron en la calle entre manifestantes con las fuerzas de seguridad, así como también los que se produjeron entre los propios legisladores, la Cámara de Diputados nacional le dio media sanción al proyecto de Presupuesto 2019 con 138 votos a favor, 103 en contra y 8 abstenciones.
Entre las principales características de la iniciativa que ya fue girada al Senado y que se tratará hacia la tercera semana de noviembre, se prevé para el próximo año un dólar a $40,10, así como también una baja de la actividad económica en el orden del 0,5%, e inflación de 23%.
Desde el oficialismo, el diputado Luciano Laspina fue el encargado de exponer -como miembro informante del dictamen de mayoría- los alcance del proyecto y subrayó, entre otras cuestiones, que el país ha estado en las últimas décadas sumido en un círculo vicioso de inestabilidad fiscal, ajuste, crisis y pobreza.
“Cada crisis genera una redistribución regresiva y la raíz de esa crisis es el déficit fiscal de los cuales somos principales responsables en este recinto. Cada uno tiene que hacerse responsable de los presupuestos ficticios que aprobó en los últimos años y aceptando el descontrol en el gasto público”, manifestó.
Desde la oposición, por su parte, no faltaron las voces críticas para con la iniciativa gubernamental sobre la que dijeron que va en contra de los argentinos y que también fue redactada a la medida del Fondo Monetario Internacional (FMI). Por caso, el diputado y ex ministro de Economía, Axel Kicillof, dijo que se trataba de un presupuesto «invotable» ya que introducía un ajuste salvaje, duplicaba la deuda, el desempleo, les quitaba recursos a las provincias y castigaba a los que menos tienen.
En otro orden y como parte del paquete económico, también se dio media sanción al Consenso Fiscal -con modificaciones-, así como también al régimen para pequeños productores cañeros, yerbateros y tabacaleros; la modificación sobre índice de precios de la Ley de Impuesto a las Ganancias; y la modificación sobre exenciones y progresividad del impuesto sobre los Bienes Personales.