Así lo entendió la Cámara en lo Civil y Comercial Federal, que rechazó el planteo de una empresa de hotelería que buscaba impedir por vía judicial un eventual corte del suministro de agua por una deuda.
La Cámara consideró, pese al planteo de la empresa, que no se probaron “las razones de urgencia invocadas” para habilitar la tramitación del planteo durante el mes de enero, en que el Poder Judicial está de receso.
La empresa argumentó que no podía pagar la tarifa y ante ese escenario, la prestadora AYSA le aplicó a la deuda “unas tasas de interés que son abusivas”.
“Un corte de agua significaría tener que cerrar el hotel, con los consiguientes perjuicios que ello representa”, advertía la presentación.
Pero los camaristas Guillermo Antelo, Alfredo Gusman y Eduardo Gottardi refutaron que no hay constancias de que AYSA planee cortar el suministro de manera inminente, pues la empresa estatal está en condiciones de adoptar tal medida desde octubre del año pasado y aún no lo ha hecho.
Para los jueces, no existe “una amenaza concreta y actual de interrupción de dicho servicio”.