El Gobierno porteño informó que a 45 días de que se estableciera el aislamiento social, preventivo y obligatorio, la Policía de la Ciudad ya detuvo a 1.129 personas por violar la cuarentena; otras 15.458 fueron demoradas, notificadas o trasladadas al domicilio, y que se secuestraron 260 vehículos en los 390 operativos de control desplegados en el territorio porteño.
Además, también se aplicaron 240 multas por el no uso de tapabocas, el cual desde este lunes es obligatorio en el espacio público, sumándose de esta manera a la obligatoriedad establecida el 15 de abril pasado de utilizarlo dentro de comercios, dependencias de atención al público y medios de transporte. En ese sentido, vale recordar que quienes no respetan la norma serán sancionados con multas de entre $10.700 y $79.180, mientras que en locales comerciales pueden efectivizarse clausuras y/o inhabilitaciones por este motivo.
Por otra parte, la Agencia Gubernamental de Control (AGC) lleva 1.554 inspecciones realizadas hasta el día de hoy por este motivo, mientras que la línea 147 atendió 440 denuncias por no usar el tapabocas, que se suman a las 19.666 que lleva registradas por violar el aislamiento obligatorio.
“Extender el uso del barbijo casero en la vía pública busca prevenir el contagio del COVID-19 ante el mayor movimiento que se viene experimentando en las calles porteñas las últimas semanas y las nuevas actividades comerciales que se fueron autorizando para retomar su funcionamiento”, señalaron desde la administración porteña.
En este sentido, recordaron que el fin de semana largo del 1° de mayo no impidió que los niveles de movilidad continúen su ascenso ya que durante esos días las autopistas porteñas tuvieron incrementos de 25% respecto al fin de semana anterior, la congestión registró aumentos de 8%, y en los accesos a la Ciudad se detectaron subas mayores al 10%.
En el subte, por su parte, hubo un aumento del 12% en los viajes, mientras que el tren incrementó sus pasajeros un 24%, y la gente que viajó en colectivo subió 30%.