El Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) se presentó ante la Corte Suprema como “amicus curiae” para denunciar “un supuesto caso de discriminación encubierta por actividad u opinión sindical”, en el despido de un trabajador de la empresa Jumbo Retail Argentina donde se desempeñaba como delegado gremial.
El Director Ejecutivo del CELS, Gastón Chillier, patrocinado por la abogada Carolina Varsky, formuló la presentación en el expediente que trata sobre el despido de Diego Armando Vargas, a quien un tribunal excluyó de la tutela sindical y avaló su despido.
El CELS reivindicó la “protección de los delegados gremiales y la regla de que el trabajador es sujeto preferente de protección constitucional, debe ser analizada en todo proceso de ponderación judicial, en la que se encuentre en juego -como ocurre en este caso- la continuidad o no de la actividad sindical como consecuencia del despido de un dirigente sindical”.
En el fallo de la Cámara -dijo el CELS- “no hay una sola mención a la calidad de dirigente sindical (del trabajador) así como análisis alguno de la ley de asociaciones sindicales y por ende, del derecho a la protección de los delegados sindicales, previsto en la Constitución Nacional, en los tratados internacionales con jerarquía constitucional”.