La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) informó que el índice de ventas minoristas se redujo 5,8% anual en enero, siendo que en la magnitud del declive incide que se está comparando con enero 2020, cuando el consumo estaba a pasos de revertir su tenencia negativa. De todos modos, el 64% de los comercios que fueron consultados manifestaron que sus operaciones a precios constantes bajaron.
Los datos surgidos de la medición de la entidad en base a 1.000 comercios de todo el país relevados entre el lunes 1° y el viernes 5 de febrero por un equipo de 30 encuestadores localizados en las capitales del país, GBA y CABA, además, arrojaron que en general los comercios no tenían grandes expectativas para enero, después de un diciembre pobre, y que incluso el 43% de las pymes consultadas creen que la situación de este año será igual a 2020. No obstante, un 50% piensa que mejorarán, mostrando así una perspectiva más alentadora que meses anteriores.
Fuente: CAME
De acuerdo al trabajo publicado, los rubros con menos caídas interanuales en el mes fueron “Alimentos y Bebidas” (-2,1%), “Farmacias” (-3%), “Electrodomésticos y artículos electrónicos” (-3,9%), “Ropa y artículos deportivos” (-3,2%) y “Ferreterías, materiales eléctricos y para la construcción” (-4,4%), y que tal como sucedió en diciembre, los cinco sectores descendieron por debajo del promedio general.
Asimismo, las bajas anuales fueron más profundas para “Mueblerías, decoración y artículos para el hogar” (-10,3%) y “Calzado y marroquinería” (-11,7%).
“En ‘Librerías y Jugueterías’, donde el despacho disminuyó 9,7%, a un diciembre flojo se le sumo un enero con Reyes Magos poco generosos en regalos lo que impactó puntualmente en las jugueterías. Hubo poca salida y los artículos más económicos. De todos modos, hubo un consumo más o menos constante durante todo el mes y se realizaron ventas de fin de año que quedaron pendientes. En las librerías, las operaciones se mantuvieron bajas ante la incertidumbre del comienzo de clases”, observaron.
En “Indumentaria”, donde el índice se redujo 9,2% anual, los comercios declararon que en este rubro -además del menor poder adquisitivo- impactó más la incertidumbre que la inflación. “Hubo temor a comprar en cuotas y utilizar tarjetas. Igualmente, la gente aprovechó las ofertas. Se observaron muchas liquidaciones y oportunidades 2×1, especialmente en ropa femenina y calzados”, señalaron desde CAME.
Por último, en “Electrodomésticos y artículos electrónicos” (-3,9% anual) hubo faltantes de productos, especialmente importados, aunque de todas formas las ventas se movieron alrededor de los planes de financiamiento, mientras que en “Farmacia” (-3% anual) hubo movimiento con bastante normalidad, pero se trata de los comercios donde más se respetan los protocolos, lo que reduce la capacidad de atención al público, especialmente los que van en busca de productos alternativos a la medicación.
Las ventas online, en tanto, continuaron ganando mercado y cada vez son más tanto las empresas como los compradores que utilizan esa vía (lo que más se usa son redes sociales).
