Con la consigna “Todos a la calle por Ale, Marina y Alexa: Si se puede evitar, no es accidente”, la movilización se concentró en la esquina de Colón y General Paz, y luego marchó hasta la Legislatura de Córdoba.
Cuando ocurrió el accidente, el sábado 29 de octubre en el Camino de las Altas Cumbres, Bengoa manejaba su Renault Sandero hacia Córdoba acompañada por dos adolescentes de 14 años, su hija Marina y la amiga Alexa, quienes sufrieron graves heridas y permanecen internadas.
El legislador, Oscar González, conducía un vehículo BMW y en el kilómetro 17, cercano al paraje “Niña Paula” impactó de frente con el Sandero, causándole la muerte a la docente que residía en Mina Clavero (González se trasladaba hacia la localidad de Villa Dolores, en el departamento San Javier donde reside).
Gustavo Álvarez, el papá de Alexa, pidió en declaraciones a medios locales “el acompañamiento de la gente. Es la única forma de lograr Justicia y evitar que por medio del poder de la política quede impune”. “González no cometió un accidente, cometió un homicidio por conducción peligrosa”, subrayó.
El legislador es un dirigente peronista histórico de confianza del fallecido José Manuel de la Sota y del actual gobernador Juan Schiaretti, y era presidente provisorio de la Legislatura, la tercera autoridad de la provincia. A partir del accidente está de licencia de sus funciones y sin goce de haberes.
El abogado Germán Romero Marcon, querellante que representa a la familia de Bengoa, manifestó que pidió a la Fiscalía que González sea imputado por el delito de “homicidio simple”, al sostener que “es lo que corresponde porque no fue un accidente. Iba a gran velocidad”.