Según la Justicia de la Capital Federal no es imprescindible haber estado en Malvinas durante la guerra para percibir un subsidio para ex combatientes.
Bastará con que la administración local hubiera incurrido en el error -primero- de pagar ese subsidio, y en otro -luego- de no haber respetado los procedimientos para quitarlo, para que un tribunal ordene que se continúe con el desembolso, aún cuando no corresponda.
Por tanto, una fiscal porteña recomendó, en consonancia con el fallo de un juez, que el gobierno local continúe pagando el subsidio a un empleado que, pese a que supuestamente no reúne los requisitos para percibirlo, lo viene recibiendo desde hace más de 24 años.
La fiscal Nidia Karina Cicero dictaminó ante la Cámara en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad que un empleado público debe seguir cobrando “el beneficio previsto en la ordenanza 39.827 (Subsidio Ex Combatientes de Malvinas), cuyo abono fue suspendido a partir del mes de enero del año 2009”.
“Más allá de que el caso del actor no quedaría subsumido en los supuestos en los que la normativa respectiva prevé el pago del subsidio, lo cierto es que la falta de acto administrativo expreso que dispusiera el cese en la percepción del mismo, configura una vía de hecho administrativa que torna ilegítimo el accionar de la Administración”, dijo el juez Guillermo Scheibler y que además avaló la fiscal Cicero.