Camporistas, representantes de movimientos sociales y otros sectores del kirchnerismo dominan las boletas seccionales del Frente para la Victoria en territorio bonaerense.
La Presidenta Cristina Fernández de Kirchner dejó espacios disponibles para que algunos “peso pesados” del Conurbano colocaran candidatos propios en las listas de aspirantes a la Legislatura. Pero repitió el esquema que ya había utilizado hace dos años: le dio una fuerte participación a los jóvenes de La Cámpora y a dirigentes de otros sectores que responden sin titubeos a la Casa Rosada.
Un rápido repaso por las nóminas impulsadas por el Frente para la Victoria (FpV) desnuda la intención de contar con un bloque compacto tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados provincial, en los que el color predominante sea el de la marca “K”.
En la Primera Sección, por ejemplo, Cristina apenas cedió el primer lugar de la lista para el intendente de Merlo, Raúl Othacehé, quien colocó a Alejandro Urdapilleta. Pero los tres siguientes nombres tienen el “ADN cristinista” marcado a fuego: Juan Debandi, un camporista de Tres de Febrero; Mónica Macha, la esposa de quien fuera intendente de Morón y actual titular del Afsca, Martín Sabbatella; y Mario Isshi, el ex alcalde de José C. Paz que cobró notoriedad cuando se alejó del distrito para “salir a cazar traidores” allá por 2009 cuando Néstor Kirchner perdió en la Provincia de Buenos Aires con Francisco De Narváez.
En el caso de la Tercera (sur del Conurbano), se repite el esquema. La lista es encabezada por el ex intendente de Berazategui, Juan José Mussi, seguido de Liliana Pintos, una ex concejal de La Matanza.
Pero luego aparecen los “ultras”: uno de los líderes del Movimiento Evita, Fernando “Chino” Navarro; Karina Nazábal, esposa del intendente de Lanús, Darío Díaz Pérez, y Hernán Doval, un concejal de Avellaneda cercano a las huestes camporistas. Además, la esposa del ex piquetero Luis D`Elía, Alicia Sánchez, va en el séptimo casillero.
En la Segunda, en tanto, el viceministro de Seguridad nacional, Sergio Berni, ubicó en el cuarto lugar a Marcelo Torres, actual funcionario del Senado bonaerense.
En la zona sudeste de la Provincia que reúne a los distritos de la Quinta Sección Electoral, los “ultra K” se quedaron con los principales espacios de la nómina. Si bien allí está anotado el único sciolista de todos los aspirantes a la Legislatura (el ex ciclista olímpico Juan Curuchet), luego aparecen dos candidatos de la Casa Rosada.
Uno de ellos es Gervasio Bozzano, un dirigente de Maipú, funcionario de la Cámara de Diputados de la Nación y que cuenta con un fuerte respaldo de La Cámpora.
La otra es Adela Segarra, otra “ultra K” de Mar del Plata que culmina en diciembre su mandato como legisladora nacional.
En el caso de la Sexta Sección, la presencia de sectores fuertemente afines a la Casa Rosada también se verifica. Uno de los casos típicos es el de Marisol Merkel, vinculada a la Juventud Peronista de Saavedra. Luego vienen el camporista Gabriel Godoy (Bahía Blanca) y Luis Calderaro, también de Bahía Blanca y actual secretario legislativo de la Cámara alta bonaerense.
También en esa lista aparece el ex senador Roberto Fernández, un hombre que responde al diputado nacional Carlos “Cuto” Moreno.
En el caso de la Séptima, el primer candidato a senador es el intendente de Tapalqué Gustavo Cocconi, quien busca llegar a la Legislatura con el respaldo de los “ultra K” Walter Abarca y César Valicenti.
Finalmente, en La Plata, excepto por la bruerista Valeria Amendolara, el resto de la lista de diputados fue monopolizada por la Casa Rosada: Gustavo Di Marzio (Movimiento Evita), Federico De Marziani (agrupación La Güemes) y Lucía Ramos Costa (Kolina).