De acuerdo a lo especificado por la Secretaría de Energía de la Nación, el proceso de transición será gradual, permitiendo una adaptación “armoniosa” a un entorno de mayor libertad y competitividad y sin poner en riesgo el abastecimiento de energía ni aumentar los costos para los consumidores.
A la vez, se remarcó que los principales ejes de dicho proceso serán:
-Descentralización de la gestión de combustibles: Los generadores térmicos serán responsables de gestionar sus propios combustibles, lo que incentivará la competencia y la eficiencia en el sector.
-Fomento de contratos bilaterales libres en el Mercado: Se promoverá la participación activa de Grandes Usuarios y distribuidores, lo que facilitará el desarrollo de nueva infraestructura de generación y transporte de energía.
-Cumplimiento de contratos vigentes: El Estado continuará cumpliendo con los contratos de generación y combustibles vigentes hasta su finalización. En caso de ser necesario, se realizarán licitaciones competitivas para nuevas infraestructuras.
A partir de esto, se afirmó que estas modificaciones permitirán normalizar progresivamente el funcionamiento del MEM, eliminando restricciones innecesarias para la libre contratación; descentralizando la gestión de combustibles; y creando incentivos económicos que estimulan la incorporación de nueva capacidad de generación en condiciones competitivas.