Apenas pasado un día de que el Ministerio de Defensa resolviera que se prohíba la utilización del llamado “lenguaje inclusivo” en las Fuerzas Armadas, desde el Gobierno comunicaron la decisión de hacerlo extensivo a toda la Administración Pública Nacional.
El objetivo de la medida es el de ordenar el uso del lenguaje para facilitar el proceso de aprendizaje de los estudiantes, el cual se vio significativamente afectado como consecuencia de la pandemia por COVID-19 luego de que se publicaran los resultados de las evaluaciones FEPBA y TESBA.
De acuerdo a lo argumentado en la medida publicada en el Boletín Oficial, “su instauración gravitará positivamente en el abordaje de la perspectiva de género de manera conjunta con los objetivos atinentes a la Seguridad Social”.