No quedan ni los libros

La semana pasada, una troupe de jueces y abogados se desayunaron con una novedad inesperada: La Biblioteca de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo... Por Cuarto Intermedio

La semana pasada, una troupe de jueces y abogados se desayunaron con una novedad inesperada: La Biblioteca de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional de la Capital Federal, permanecerá cerrada “hasta nuevo aviso”…  

(Cuarto Intermedio – 11 de agosto de 2011)- Un mail enviado por Valeria Rebagliati, secretaria de Jurisprudencia y Biblioteca de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional de la Capital Federal, anoticiaba que “por orden del Presidente de la Cámara, Gustavo Bruzzone, la Biblioteca a mi cargo permanecerá cerrada hasta nuevo aviso, toda vez que la totalidad de su volumen debe ser trasladado por obras de remodelación”. Todo es cierto, pero falta una parte de la verdad que hasta ahora es inocultable entre los jueces de Cámara. Bruzzone intenta darle a su gestión como presidente, que concluirá a fin de año pero que espera a renovar, una característica de gestión “de temas jurídicos”. En los cuatro años que estuvo a cargo de Mario Filozof, la Cámara consiguió edificios, espacios, nuevos servicios, y convenios de infraestructura. Filozof fue luego candidato a presidente de la Asociación de  Magistrados y estuvo muy cerca de ganar. Bruzzone intenta ahora un camino similar, pero haciendo hincapié en las cuestiones profesionales. Una cosa lo diferencia de Filozof: no tiene vínculos políticos y así, crecer, le resulta mucho más difícil.“La Secretaría de Jurisprudencia seguirá brindando el servicio que habitualmente damos, pero sólo se entregarán fallos que estén en las bases de datos y doctrina que pueda extraerse de los prestadores de servicios on line. Esperando que sepan disculpar las molestias, oportunamente comunicaremos la reapertura”, resume el mail. Allí podría estar la clave del derrumbe de las aspiraciones de Bruzzone: si la biblioteca no reabre rápidamente, su intención de mostrar una gestión eficiente podría naufragar y, con ella, sus aspiraciones de proyección dentro de la política de los jueces.