Los senadores provinciales de la UCR anticiparon sus objeciones a la reforma tributaria que impulsa el gobernador de Santa Fe, su aliado político el socialista Antonio Bonfatti.
Para intentar acercar posiciones, Bonfatti recibió el lunes por la tarde al presidente de la UCR nacional, Mario Barletta, quien llegó a la Casa Gris con un pliego de condiciones. Antes, los legisladores radicales habían plantado a Bonfatti en una reunión prevista para discutir el asunto.
Los radicales exigen recortar la delegación de facultades al Ejecutivo en materia impositiva que contempla el mensaje impulsado por Bonfatti y proponen gravar con el impuesto a los ingresos brutos a grandes empresas. Respecto del impuesto inmobiliario, señalan que “no debe afectar la valuación fiscal de los inmuebles”.
“Le hemos dicho al gobernador que el radicalismo tiene una posición unánime respecto a que no se sigan transfiriendo recursos a la Nación, cuando ésta rechaza el planteo de Santa Fe para que se termine con la detracción indebida del 15 por ciento de coparticipación para la Anses”, dijo Barletta, luego de reunirse con Bonfatti durante una hora y media.
“No hay que dramatizar, el diálogo está vigente y tratamos de mantener los cauces del funcionamiento del Frente Progresista”, dijeron los diputados socialistas Eduardo Di Pollina y Raúl Lamberto y el senador por Rosario, Miguel Lifschitz.