En Santa Fe, el diputado provincial José Tessa (Nuevo Encuentro) presentó un proyecto de ley elaborado por los militantes de la campaña “Paren de Fumigarnos”, basado fundamentalmente en las distancias de aplicación y no en la toxicidad de los productos.
El proyecto busca prohibir la fumigación aérea y limitar todo tipo de aspersiones a menos de 800 metros de los centros poblados y las zonas sensibles, y a 1.000 metros de las escuelas rurales.
Además, propone que se prioricen las áreas libres de agroquímicos para la producción de alimentos de consumo humano y de agricultura familiar, y denuncia que esas actividades han sido desplazadas por las explotaciones agrarias con métodos químicos y manipulación genética, lo que tendría graves consecuencias para la salud de la población.
El texto regula la venta, transporte y aplicación de agroquímicos, la utilización en plantas de acopio y banquinas, y disposiciones sobre el destino de los envases, entre otras restricciones.
Los impulsores de la iniciativa recordaron que en los últimos años hubo muchos intentos. “Una tras otra fueron ignoradas, ocultadas y en ocasiones confrontadas con proyectos en los que claramente aparece la asesoría del aceitado lobby empresarial-lucrativo”, expresaron.