El proyecto fue impulsado por la agrupación La Cámpora y establece fuertes restricciones para la fumigación de los campos.

Un proyecto de ley impulsado en el Senado bonaerense por el kirchnerismo que impone severas restricciones a la aplicación de agroquímicos en los campos de la Provincia de Buenos Aires, y que prohíbe la fumigación en las cercanías de las zonas urbanas, fue centro de un fuerte reclamo en la Legislatura provincial por parte de entidades rurales.

El planteo fue presentado en el marco de una serie de reuniones que los dirigentes de las principales organizaciones del campo mantuvieron con los bloques de diputados y senadores de la UCR, el FAP y el Frente Renovador.

Concretamente, los ruralistas manifestaron su preocupación ante el avance de un proyecto redactado por la senadora Marina Moretti, del Frente para la Victoria (FpV), que impone fuertes restricciones a la aplicación de agroquímicos.

La norma, prohíbe expresamente la fumigación de campos a una distancia menor a los 2 mil metros de los límites de cualquier centro urbano del territorio bonaerense.

Las entidades, a través de sus representantes, expresaron que “se había estado trabajando mucho respecto al tema, convergiendo en un decreto que se encuentra a la firma del Gobernador Scioli y que, más allá que existen cosas que perfeccionar, los puntos allí incluidos aclaran y normatizan el tema en cuestión y que llama poderosamente la atención como habiendo un consenso que respalda a ese decreto, aparece un nuevo proyecto para regular la actividad y su implementación”.

En el transcurso del encuentro quedó plasmada la necesidad de trabajar en la concientización de los usuarios y poblaciones para que se comprenda que a través de una buena práctica los agroquímicos no son perjudiciales y que el INTA tiene desarrollados muy buenos trabajos al respecto. Además, se coincidió en la necesidad de capacitación y control para la instrumentación de los agroquímicos con el objetivo de asegurar una buena práctica de los mismos.

El estilo de las prácticas -sean estas terrestres o aéreas- y la distancia a las poblaciones también fue un tema tratado, teniendo en cuenta la cantidad de hectáreas que quedarían sin producción por no poder usarse los agroquímicos.

Estuvieron presentes representantes y dirigentes de CONINAGRO, SRA, INTA, CARBAP, Federación Agraria Argentina, CPIA (Centro de Profesionales Ingeniería Agronómica), CASAFE (Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes), CIAFA (Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos) y la Federación de Centros y Entidades Gremiales de Acopiadores de Cereales.